Etapas del duelo
- Negación
- Ira
- Negociación
- Depresión
- Aceptación
NEGACIÓN
La etapa de «negación», consta del primer encuentro que se tiene con la noticia de tu perdida o cambio abrupto en tu estilo de vida. Cuando puedes sentir que no es verdad y que no vas a poder con ello. A veces no puedes llorar porque tus emociones están paralizadas. Este sentimiento varia dependiendo de cada persona y situación.
IRA
Esta emoción es una frustración que viene después de haber pasado la negación. Te enojas con Dios, contigo o con algún familiar al cual le adjudicas la responsabilidad de la perdida o el cambio. Puedes quedar atrapado en un bucle de reclamos.
Si llevas meses en este sentimiento, busca ayuda de un profesional.
NEGOCIACIÓN
En esta etapa estás dispuesto a negociar una reconciliación o un cambio de actitud en una perdida reversible. En caso de una enfermedad se comienzan a buscar alternativas de curación e incluso algún familiar cercano comienza a hacer ‘mandas’, ‘encomiendas’ o ‘promesas’ a su Deidad.
DEPRESIÓN
Te das cuenta que el cambio es inminente y sabes que esa persona ya no volverá, puedes comenzar a sentir una profunda tristeza, lloras, te duele el corazón, pierdes interés en cosas que antes hacías, no sales con amigos/familiares, dejas de comer o hacer cosas que te recuerden a él/ella/eso.
También vives una gran melancolía al darte cuenta que no volverás a ser la persona que eras antes de estar pasando por una enfermedad, mudanza o ruptura amorosa.
Si tienes más de 6 meses lidiando con la tristeza, acude a un profesional de la salud psicoemocional.
ACEPTACIÓN
Aquí puedes sentir que respiras aliviado, que vuelves a ser tú pero más fuerte y más sabio. Ya hablas con más tranquilidad sobre el tema y puedes ver con claridad el aprendizaje que esa experiencia te dejó. Desarrollas virtudes, habilidades y desbloqueas nuevos panoramas mentales.
Estas experiencias de perdidas, nos hacen desarrollar como seres humanos nuevas habilidades y diferentes contextos mentales y emocionales. Todos pasaremos por diversos quebrantes a lo largo de nuestra vida, lo importante es tener segura tu red de apoyo, estar abierto al cambio y a la introspección misma.
